domingo, 25 de octubre de 2009

Reiki y los bebés




Difícilmente exista un modo más natural y agradable de impartir Reiki que el de una madre con su bebé. Una madre sostiene a su bebé en forma amorosa y una vez que ha aprendido a aplicar Reiki puede pasarlo a su bebé cada vez que lo toca y lo acaricia.

Esa elevada forma de energía intensificará la relación natural entre madre e hijo, y la refinará sin cesar. Mas todavía: todo lo que el niño experimenta durante sus primeras semanas, meses y años, lo condiciona para toda su vida.

Quien ha recibido mucho amor y afecto en sus tiempos de bebé, será en general capaz de trasmitir estas cualidades cuando sea mayor.

Una mujer embarazada puede pasarle Reiki a la criatura que está en su interior e influenciar favorablemente el curso de su vida venidera.

Aunque Reiki puede utilizarse para cada pequeño malestar y dolor, también sustentará el proceso de sanación en los casos de enfermedades serias. En toda situación tendrá un efecto positivo y terapéutico y ha demostrado su potencial como ayuda para conciliar el sueño.

Por supuesto, siempre resulta posible tratar a bebés y niños que no son propios, pero siempre es mejor que las madres y los padres traten a sus propios hijos, dado que el contacto entre ellos es natural.

1 comentario:

yolanda dijo...

Me ha gustado mucho tu blog. Si te apetece pásate por el mío ahhhlaladeco.blogspot.com, y si te gusta yo encantada de recibir una seguidora más.
Besiños
Yolanda